Estás aquí

Me he desvelado, creo que ha sido la lluvia golpeando en la ventana... Es tarde y el silencio de la noche me desconcierta. 

Me he girado, buscando una sensación de confor, una caricia de la almohada, un abrazo de las sábanas y .. Estabas a mi lado. 

¿Desde cuando? ¿Qué haces ahí? ¿Cuándo has vuelto? No te he escuchado llegar... 

Realmente no me importa, es más, me encanta. No te esperaba pero aquí estás, a mi lado. Que se pare el mundo. 

Tras recuperar el aliento, me he quedado mirándote un buen rato, hacía tanto tiempo que no te veía junto a mi, dormido, plácido, tranquilo... 

Sin despertarte he querido acariciarte. He querido sentirte. No puedo ocultar mis ganas. Primero he buscado tu mano, caliente, suave. No te has despertado, pero si te he escuchado cambiar el ciclo de tu respiración, te ha gustado, verdad? No he desistido, he recorrido con la llema de mis dedos tu brazo, hasta llegar a tu hombro, fuerte y marcado. Una vez allí y sin dudarlo mi clara intención eran caricias en tu pelo, en la nuca, en la sien... Pero pocas, no quiero despertarte. Se que te encantan y me encanta que te encanten. 

No he dejado de mirarte ni un segundo, no he dejado de atender tu respiración, no he querido dejar de tocarte. 

Pero no es suficiente, lo sabes, lo se, asique con toda mi disposición me he hecho un hueco en tu pecho, a pocos centímetros de tu corazón, tus latidos me tranquilizan, los echaba de menos. He conseguido que tus brazos me rodeen y tu mano juguetee en mi pelo. No puedo ser más feliz. 

¿De verdad estás aquí? ¿Es tu respiración la que escucho? ¿es tu corazón el que siento? 

Si es un sueño... No quiero despertar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario