Por ti, por mi.

"Maca, ¿por qué ya no escribes?" 

Pues la verdad es que no será por las veces que lo intento. No será por borradores, ni ideas en mi cabeza. 

Te prometí, ante tus insistentes peticiones, que no dejaría de escribir e intento no quebrantar aquel trato. Por ti, por mi. 

Quiero que sepas que escribo muchos textos que no publico, que tengo guardados varios que no llegas a leer, muchas veces son frases sueltas, inconexas, incoherentes, introducciones de historias que dejan de convencerme en el tercer párrafo. Las hay, por su parte, que debo dejar de escribir porque alcanzan un alto contenido emocional y se me nublan los ojos con cada frase. Hay otras entradas que son muy, demasiado, personales y que no dejo que salgan de donde nacen. 

Pero no he roto esa promesa y en el fondo soy consciente de que lo sabes. Sabes que en mi mesilla hay un cuaderno y un boli con mil borradores y tachones, que en mis noches de insomnio mi cabeza maquina historias inimaginables y que cuando paseo por la calle con el ceño fruncido estoy escribiendo mentalmente. 

No voy a dejar de escribir, por ti, por mi. 

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