Lamentablemente

Cogió el aire y lo soltò con suavidad. Temió que le doliese tanto como las milésimas de segundo que acababa de vivir. Se abrazó a sí misma, buscando refugio. Notó que las manos le temblaban y una lágrima caía por su lagrimal. Lamentablemente ya había vivido esto en alguna otra ocasión, lamentablemente. Y le hubiese encantado decir que casi tenía olvidada esa sensación. Pero no, lamentablemente no. Seguía latente en algún lugar de su cuerpo/corazón/ cabeza/alma... Y hoy le había tocado revivirlo. Lamentablemente.

Aún se le estaban desagarrotando los músculos cuando el silencio volvió a hacerse protagonista del pequeño dormitorio. Ya no era sólo una tímida lágrima, ya había más de dos las que sin poder cesar recorrían sus mejillas.

Intentó tranquilizarse, intentó seguir suavemente su respiración, alguna vez le había ayudado. Pero todo fue, lamentablemente, en vano.

Muchos recuerdos revividos y de la misma manera. Aquel sentimiento otra vez. Y esta vez no era pena, ni tristeza... Esta vez, lamentablemente, era miedo. Como hacia tiempo que no sentía.

Sabía que hoy iba a ser una noche larga y dura, lamentablemente.